EL MERO UN EREMITA EN EL MAR
Los meros también conocidos en otros puntos de nuestra península como chernas, son unos peces muy atractivos para todos los que nos gusta practicar el submarinismo. El motivo es por el tamaño que pueden llegar a alcanzar de más de un metro y sobre todo porque suelen ya con cierto tamaño a ser confiados y permiten su aproximación hasta el punto de poder verlos muy de cerca. Tienen la particularidad de ser
hermafroditas. Todos nacen hembras y según la necesidad suelen transformarse con los años en machos. Algunos individuos han llegado alcanzar casi 30 años, aunque desgraciadamente con la sobrepesca esta especie es cada vez más escasa y es muy raro salvo en lugares protegidos poder contemplarlos en su máximo esplendor en cuanto a tamaño y peso se refiere.
Son muy solitarios salvo en verano cuando entra en periodo de celo y es habitual la presencia de la pareja saliendo y entrando por las cavidades submarinas. Es por la noche cuando podemos ver como el mero deja la protección de la cueva y sale a alimentarse principalmente de crustáceos como langostas y sobre todo cefalópodos como es el caso de los pulpos. Una buena parte de las mutilaciones de estos tienen una parte de culpa los meros, aunque cuando decide comer lo hace con gran voracidad y suele dar pocas posibilidades a sus víctimas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario