POR FIN SE VIÓ LA LUZ

                                                     VUELTA A LA COLGADA

   Como no me había quedado como quien dice muy satisfecho el pasado mes de mayo con mis inmersiones en Ruidera, opté esta vez por ir a intentarlo de nuevo en el mes de julio. Aguas más limpias aunque solo la colgada, ya que la batana seguía algo turbia por culpa de la cal en suspensión. Resulta curioso el destacar que en lo que hace referencia a la temperatura del líquido elemento,  la más clara tenía una mayor en detrimento de la que presentaba una mayor turbiedad que era de

dos grados menos. Lógicamente los rayos del sol al poder penetrar más abajo permitia que la de mayor limpieza presentase una mejora de su temperatura, o al menos eso me imagino. Al final no muchos lucios para lo que se podría esperar, pero eso sí estos de gran tamaño. Hay que destacar la práctica desaparición del black bass en beneficio de otras especies como resulta lógico como son el caso de los cangrejos rojos y las percasoles. Al no haber un depredador que las controle pues estas proliferan por todos lados. La conclusión a la que llego es que en pocos años y comprobando que no hay algo vital para el futuro de una especies como son sus alevines, el lucio correrá el mismo camino que el bass, ya que no pude encontrar ningún lucio como había ocurrido en otras ocasiones
de pequeño tamaño que garantizase que la especie se está reproduciendo con absoluta normalidad. Esperemos que esto solo sea la opinión de un neófito en la materia y que de aquí a unos años podamos ver nuevamente lucios de un kilo a medio kilo y sobre todo que podamos disfrutar con la presencia del simpático bass.